La veta artística de la familia Medina fue ampliamente conocida en Antihuala, Temuco Chico y la provincia en general. En la década de los años setenta y ochenta del siglo pasado, varios de ellos, se presentaban en diversos escenarios locales. Teresa Guzmán, hoy viuda, abuela de varios nietos, actualmente vive en la localidad de Temuco Chico.
Teresa recuerda que desde niña siempre estuvo en los escenarios. Durante su juventud se presentó en escenarios de Pilpilco, Cañete, Curanilahue y el Teatro de la Universidad de Concepción, entre otros.
Al momento de la entrevista Teresa Guzmán, que tiene de visita a su sobrino Roberto, recuerda que sus hermanos, su cuñado y otros sobrinos se presentaban en Antihuala, hasta en tres ramadas. También eran fijos para las veladas y los bailes en la escuela N° 8 de Antihuala. Sonrientes me comentan que, para las veladas y ramadas siempre estaban "Los Medina".
En los años sesenta al setenta formó parte del trío Los Diamantes del Sur. En la época en que existía el Festival de la Una, el animador Enrique Maluenda estuvo en Cañete y ella en un concurso de canto se ganó "una tetera".
También se dedicó a la investigación folclórica, conversando con personas más antiguas, especialmente en los campos, a las cuales les escuchaba las canciones, copiaba sus letras y luego las difundían. En la década de 1980, junto a la profesora Gabriela Méndez y el señor Héctor Anguita, ambos de Cañete, recopiló más de 300 canciones que guarda en cassette. En esta oportunidad nos muestra una canción que cantaba su abuelita, denominada: Penas marchitas.
Vea el siguiente video, con la canción mencionada.
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